Ella

Mi primera intención era cruzarle la cara con un sonoro bofetón, pero dicen que la violencia es el primer recurso del incapaz...

Muchas horas de coche y conducir acaban aclarando la mente y serenando los ánimos.

Recordando paseos amargos por conversaciones de luto, miro ahora las rayas discontinuas de la carretera como si fueran trozos de vida partidos, rotos, unidos, rotos, renacidos, vueltos a unir y vueltos a romper. 
Pensaba charlar con usted, pensaba gritarle, pensaba concienciarle,quería convencerle, quería suplicarle que vuelva a por ella y la haga feliz.

Me imaginaba que alguien de su nivel, de su formación, de su recorrido por el mundo; podía tener más capacidad de querer que no de quererse. Pensaba que podría tener una visión sobrenatural de las cosas, que no tiene. Creía que tendría esa capacidad de querer, de amar y proteger..... Pero llego a la conclusión que para usted todo ha sido un juego, en el que más o menos habrá sentido, pero en el que nunca ha querido de verdad.

Incapaz de compartir es... es usted. Incapaz de escuchar los momentos de penar de aquellos que supuestamente forman parte de tu artificiosa manera de vivir ¿Tanto le cuesta oír el dolor de Ella? ¿Por qué solo se quiere a si mismo, verdad? ¿Alguna vez será capaz de escuchar a alguien? ¿Alguna vez bajará los telones de todos los escenarios para vivir, querer y entregarse a alguien?

Las obras de teatro también tienen un final. Puede andar deambulando de bolo en bolo por todas esas carreteras de líneas discontinuas, líneas rotas que se deshacen y rehacen. Puedes llegar a comprar escenarios y públicos, pero solo tendrá eso, lo que compre...

Usted me da lástima. Y le agradezco que haya declinado mi invitación. Prefiero hablarle a una silla vacía y a una taza de café frío antes de que profane uno de mis rincones más íntimos y tranquilos. Ha perdido usted la inmortalidad, porque prefiere la del vacío del presente a la eternidad y el amor que le ofrecía ELLA.